¡Vaya! Estás aquí por que seguramente traes un problemón con el SAT llamado Crédito fiscal y no sabes ni por qué surgió ¿verdad?
Bueno, pero estamos seguros que tu contador te ayudará a resolverlo… ¡No me digas! ¡Ya no te contesta el teléfono! O te dice que tiene otros asuntos más importantes que atender…. No te preocupes, mientras tiene tiempo de atenderte, nosotros como tu amigo en los negocios, aquí te vamos explicando un poco.
Mira, ese Crédito fiscal seguramente nació por el incumplimiento o la omisión (voluntaria o involuntaria) del pago de una de las tantas obligaciones que tienes como contribuyente con el Estado. Así que, si llegaste a pensar que el Crédito fiscal es un préstamo de dinero o algo por el estilo, déjame decirte que es todo lo contrario, pues en realidad es una sanción que nos impone la autoridad por no cumplir con el pago de impuestos como es el ISR, IVA, impuesto predial, indemnización de cheques devueltos y demás.
Y como bien sabemos, la autoridad cobra si por que sí y hasta después de la muerte, porque la deuda se transfiere no se extingue, así que lo que esta hace es descontarla o acreditarla contra algún saldo a favor del ejercicio o contra los pagos provisionales de dicho impuesto, en los diez ejercicios siguientes hasta agotarlo o en su defecto embargando todos tus bienes hasta agotar el adeudo.
Antes de llegar a todo lo que te mencionamos, tu contador debió avisarte de cualquier notificación en tu buzón tributario para evitarlo, pero déjanos adivinar… ¡No te avisó! Ahora entendemos porque no te contesta o atiende tus dudas, ¿correcto?
Bien, nosotros te dijimos que no te preocuparas y lo volvemos a reiterar, porque somos tus amigos y nuestra prioridad siempre es ayudar a cuidar de su patrimonio. Por eso, te obsequiamos una Radiografía fiscal para que, después de ello, implementemos una gran estrategia que ayude a eliminar este problema que no te deja dormir, y lo mejor de todo es que es bajo el marco legal.
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